El primer debate entre los candidatos a la Presidencia de la República destacó por el contraste de propuestas y la crítica entre los representantes de diversas coaliciones políticas. En un encuentro marcado por la confrontación, se abordaron temas cruciales como salud, educación, combate a la corrupción y no discriminación.

Claudia Sheinbaum, de la coalición Sigamos Haciendo Historia, y Xóchitl Gálvez, de Fuerza y Corazón por México, protagonizaron un intenso intercambio de señalamientos, destacando acusaciones de corrupción y falta de resultados en temas clave como salud y seguridad.

Por su parte, Jorge Álvarez Máynez, de Movimiento Ciudadano, planteó propuestas alternativas y criticó el sistema político tradicional, buscando destacar la necesidad de un cambio profundo en la política mexicana.

El debate también estuvo marcado por críticas hacia la organización del evento, con quejas sobre el formato, la producción y fallas técnicas, incluyendo problemas con el cronómetro que generaron tensiones entre los candidatos.

En las redes sociales, el debate suscitó un gran interés entre los internautas mexicanos, reflejado en el aumento de búsquedas sobre los candidatos y los temas abordados durante el evento. Las etiquetas relacionadas con las declaraciones y acciones de los participantes dominaron las tendencias en plataformas como X antes Twitter, demostrando el impacto del ejercicio democrático en la opinión pública.

Con un ambiente de confrontación y propuestas divergentes, el primer debate presidencial deja en claro las diferentes visiones y enfoques de los candidatos para enfrentar los desafíos del país, mientras la contienda electoral avanza hacia las próximas etapas.