La directora del penal femenil de Santa Martha Acatitla, Adriana Villeda Salazar, ha autorizado el ingreso sin revisión de cajas con 500 despensas, cada una conteniendo una botella de gel antibacterial de 450 mililitros, que fueron entregadas a las internas.

Este hecho ha generado controversia, ya que en todas las aduanas de los centros de reclusión está prohibido pasar desinfectante debido a su alto contenido de alcohol, que podría ser utilizado para la preparación de bebidas alcohólicas por las personas privadas de la libertad.

El reparto de despensas se llevó a cabo el pasado jueves 14 de marzo, gracias a la donación de la Fundación Somos Amigos, de la comunidad judía en México. El evento, encabezado por Villeda Salazar, contaba con la presencia prevista de un alto funcionario de la Secretaría de Seguridad de la Ciudad de México, sin embargo, su cancelación de última hora dejó una situación inusual.

A pesar de la ausencia del funcionario, las despensas fueron distribuidas, sin protocolo alguno, entre las internas del penal. Posteriormente, se ordenó el despliegue de custodias y personal del penal para tratar de decomisar el gel antibacterial, pero solo se logró recuperar una fracción de las botellas distribuidas.

Este incidente ha levantado preocupaciones sobre la seguridad y el control de sustancias dentro del penal, así como sobre la transparencia en el manejo de donaciones y la actuación de las autoridades penitenciarias.