El cohete Vulcan Centaur de United Launch Alliance (ULA) despegó con éxito desde la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral en Florida en la madrugada de este lunes. La Misión Peregrine Uno (PM1) de Astrobiotic, a bordo del Vulcan, marca un hito al ser la primera misión robótica comercial estadounidense hacia la Luna en más de medio siglo.

El módulo de aterrizaje lunar Peregrine, cargado con instrumentos científicos de la NASA y siete países, incluyendo una innovadora misión mexicana, se dirige a una órbita elíptica a más de 360 mil kilómetros sobre la Tierra para alcanzar la Luna de forma autónoma.

La contribución mexicana al proyecto, cinco microrobots autónomos del proyecto Colmena, desarrollados por la UNAM, se unirá a la exploración lunar y la minería espacial. Estos robots de 12 centímetros de diámetro y menos de 60 gramos cada uno, equipados con ruedas, sensores y computadoras, buscarán analizar la factibilidad de construir estructuras en superficies planetarias mediante enjambres autoorganizados.

Además de la carga científica, el Vulcan lleva una carga inusual, incluyendo muestras de ADN de expresidentes estadounidenses y cenizas de actores de la serie "Star Trek", destinadas a una empresa fúnebre espacial.

La NASA, a través de esta misión, buscará localizar moléculas de agua en la Luna, medir la radiación y evaluar la exósfera lunar, contribuyendo a la comprensión de la interacción de la radiación solar con la superficie lunar.

Este lanzamiento exitoso marca un paso significativo en la exploración lunar y subraya la colaboración internacional en la investigación espacial.