El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha calificado el caos vivido anoche en el Congreso de Nuevo León como el resultado de una confrontación prolongada entre los partidos PRI y PAN con el gobernador con licencia, Samuel García. Este último, quien busca la presidencia en 2024, ha sido el epicentro de una batalla política que ha llegado a su punto culminante con la elección del gobernador interino.
López Obrador arremetió contra el sector conservador, defendiendo a García y denunciando que este grupo "se cree dueño" de la clase media, atacando no solo al gobernador, sino también a su esposa Mariana Rodríguez. Según el presidente, la oposición conservadora actúa con un "pensamiento corporativo" y se opone a cualquiera que no se sume a su estrategia.
El mandatario lamentó la actitud de los conservadores y criticó a Claudio X. González, uno de los opositores de García, acusándolo de ser "neófito en política". López Obrador señaló que el enfrentamiento se intensificó desde que Samuel García anunció su participación en la contienda presidencial.
En medio de la controversia, el Congreso de Nuevo León designó a Luis Enrique Orozco como el nuevo gobernador interino, quien ocupará el cargo desde el 2 de diciembre de 2023 hasta el 2 de junio de 2024. Orozco, vicefiscal del estado, fue seleccionado tras el rechazo de los cuatro integrantes de la terna propuesta por Samuel García.
La tensión alcanzó su punto máximo cuando simpatizantes de Movimiento Ciudadano (MC), partido al que pertenece García, irrumpieron en el Congreso estatal durante la sesión para impedir el nombramiento. Se reportaron disturbios, incluyendo el lanzamiento de gas, mientras los manifestantes tomaban la tribuna entre empujones y enfrentamientos. El episodio deja a Nuevo León sumido en un panorama político incierto y polarizado.