Los ejidatarios de Huay-Pix han levantado la voz al denunciar la extracción diaria de entre cinco y diez pipas de agua de su comunidad para utilizarlas en las obras del Tren Maya, sin contar con ningún permiso o concesión por parte de la Comisión Nacional del Agua. Esta acción representa una clara violación a la Ley de Aguas Nacionales.

Según los pobladores, miles de metros cúbicos de agua son extraídos del Estero de Chac, un terreno pantanoso ubicado en la comunidad de Huay-Pix, a unos 15 kilómetros de la capital del estado. Las pipas transportan el agua desde el final de la calle Venustiano Carranza, que cuenta con acceso público y sin vigilancia hacia la laguna.

La Ley de Aguas Nacionales establece como delito federal la explotación, uso o aprovechamiento de las aguas nacionales en volúmenes superiores a los autorizados en los títulos respectivos o en las inscripciones realizadas en el Registro Público de Derechos de Agua. A pesar de las críticas al marco legal sobre el agua, la extracción para el megaproyecto en la Península de Yucatán se lleva a cabo en clara ilegalidad.

El Estero de Chac ya había sido afectado por las obras del Tren Maya en 2023, cuando se denunció que el humedal fue rellenado para permitir el paso de los materiales de construcción del megaproyecto. Esta nueva denuncia refleja una preocupación creciente por el impacto ambiental y la legalidad de las acciones relacionadas con el desarrollo del Tren Maya en la región.